ANALIZANDO LA CAL
La cal (óxido de calcio), también conocido como cal viva, es un compuesto químico derivado de la piedra caliza. La cal se utiliza para ablandar el agua: el tratamiento de agua con cal hidratada (hidróxido de calcio) elimina la dureza causada por los minerales de carbonato. El tratamiento con cal remedia la dureza del carbonato, dureza que resulta de minerales de calcio de no carbonato y sales de magnesio. Las empresas de agua utilizan cal hidratada para preparar el agua para los procesos de tratamiento mediante el ajuste de pH del agua. Para minimizar la corrosión de tuberías y equipos, los servicios públicos añaden cal para neutralizar el agua ácida.
Como vemos, todo son aspectos positivos, excepto uno: si lavas el coche o los cristales de casa. La cal puede dejar impurezas o «manchitas» en la pintura de nuestro coche, a veces difíciles de quitar. La peor parte se la llevan los vidrios (cristales) del coche, ya que si lo dejas secar al sol sin eliminar el agua a mano, la cal se queda incrustada en el vidrio.
POR QUÉ OCURRE ESTO
Como hemos leído, la cal es un compuesto químico derivado de la piedra caliza. En pocas palabras: son restos derivados de una piedra caliza, por tanto ensucia. Esa suciedad es la que no podemos eliminar fácilmente y que, cuando está humedecida se puede eliminar sin problema alguno. Por eso nunca debemos esperar a que se seque.
CÓMO ELIMINAR LA CAL
Hay numerosos productos que nos ofrecen milagros para quitar la cal de nuestros cristales. Sí, algunos son bastante buenos, pero te pueden salir perfectamente por 15 € unos cuantos mililitros. Si es posible, es mejor hacerlo de forma casera. Veremos el remedio casero para limpiar la cal de una superficie, cristal o vidrio de forma rápida y eficaz.
Lo primero, necesitamos:
- Recipiente y cuchara
- Estropajo (ANTES DE USAR, LEER)
- Bayeta/esponja
- Vinagre
- Bicarbonato (ANTES DE USAR, LEER)
Elaboraremos dos planes de limpieza. El primero (A) será el básico y elemental para eliminar la cal de cualquier superficie siempre y cuando no esté demasiado incrustado. El segundo (B) será un plan infalible pero a la vez arriesgado, pues si hay piezas delicadas estas pueden resultar dañadas o perder su color, o en su defecto tomar un color blanquecino.
A – LIMPIEZA BÁSICA
Calentaremos un vaso de vinagre y posteriormente empaparemos la bayeta o esponja de vinagre. Mojaremos bien la superficie a tratar y posteriormente, en unos segundos, refregaremos bien hasta eliminar toda la cal. Es importante secar inmediatamente con un trapo seco (a ser posible de microfibras, ya que si suelta pelusa puede resultar engorroso de eliminar los restos de pelusa).
Repetir el proceso tantas veces como sea necesario, siempre refregando en horizontal y en vertical y nunca en círculo, pues podemos dejar marcas o arañazos en el cristal o superficie a tratar.
B – LIMPIEZA SEVERA
Si hemos comprado un coche de segunda mano y tiene señales de cal que no salen a la primera ni a la segunda, no nos queda otra. Haz lo mismo que en el paso A y, a ser posible, calienta aún más el vinagre.
Empapa bien la superficie a tratar y con un estropajo refriega hasta que salga (no ejerzas mucha presión sobre el cristal, pues si aplicas demasiada fuerza puedes arañar el vidrio). Daremos pasadas rápidas y repetidas de forma que la cal se elimine pero sin arañar el cristal. Nunca haremos movimientos en círculo.
Si esto no funciona, empapa de nuevo la superficie de cristal (si es pintura mejor no hagas este paso) y echa un poco de bicarbonato en polvo. Espera a que actúe y entonces con una esponja refriega normalmente (puedes hacer uso del estropajo pero ten cuidado, pues podrás arañar la superficie).
Repite este proceso una y otra vez hasta que salga.