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René Descartes. Racionalismo y reglas del método

Este filósofo y científico francés ha sido considerado como «padre de la Filosofía Moderna». La clara definición de sus fines y la amplitud de su proyecto son rasgos característicos del pensamiento cartesiano. Su proyecto inicial pretende el logro de una ciencia universal. Así pues, el proyecto cartesiano va a concretarse bajo un lema: la unidad de la ciencia, que planteará en un contexto matemático. El desarrollo del pensamiento cartesiano constituye una progresiva explicitación y fundamentación de este proyecto inicial de unidad entre todas las ciencias. Descartes no acepta los cimientos del conocimiento aceptados por sus predecesores y por ello se esfuerza por construir un nuevo edificio filosófico, asentado sobre cimientos firmes.

 

Este proyecto cartesiano de elaboración de una ciencia universal, nace en gran medida como reacción frente a la filosofía escolar de su época que Descartes percibe como caracterizada por el desacuerdo en casi todas las cuestiones. Por otra parte, rechaza la lógica silogística que había imperado durante toda la escolástica. De este modo, frente a la idea escolástica, según la cual los procedimientos deben adecuarse a los distintos objetos de cada ciencia, Descartes considerará que el método ha de ser único, es decir, común en sus reglas para todas las ciencias. La raíz principal de su racionalismo consistirá, precisamente, en postular la conveniencia de un método: un método general que daría la unidad de la ciencia universal.

El método expresa la estructura de la razón humana, tal y como ésta puede aplicarse al conocimiento verdadero de los objetos, y por eso mismo sustenta a cualquier ciencia. El método es el fundamento de la ciencia universal y, por lo tanto, el núcleo de su racionalismo. No hay conocimiento, ya sea en el ámbito científico o filosófico, que no pueda ser racional, es decir, expuesto conforme a las reglas del método. Para buscar dicho método, su referencia fundamental serán las matemáticas: desde su juventud había cultivado las matemáticas, observando que las proposiciones matemáticas no deben su verdad a la experiencia, sino a la razón («verdades de razón»). Considerará que únicamente en las matemáticas se pueden encontrar verdaderas demostraciones, es decir, ciertas y evidentes. De aquí surge su propósito de crear una especie de matemática universal, liberada de los números y de las figuras, para que pueda servir de modelo a todos los saberes. En este contexto de crítica y de recuperación de las ciencias matemáticas hay que leer el pasaje en el que Descartes, en su “Discurso del Método”, afirma que quiere inspirar el método del nuevo saber en la claridad y el rigor típicos de procedimientos geométricos: “Aquellas largas cadenas de razonamientos, todas ellas sencillas y fáciles, de las que se suelen servir los geómetras para llegar hasta sus más difíciles demostraciones, me habían dado la ocasión de imaginar que todas las cosas que el hombre puede conocer se producen del mismo modo y que, si nos abstenemos de aceptar por verdadera una cosa que no lo es, y siempre que se respete el orden necesario para reducir una cosa de otra, no habrá nada que esté tan lejano que al final no pueda llegarse allí, ni nada tan oculto que no pueda descubrirse.

Así pues, las matemáticas le sirvieron de paradigma o modelo en la búsqueda de unas primeras verdades absolutamente ciertas que le sirvieran de apoyo en la reconstrucción del edificio de la ciencia y la filosofía.

La filosofía significa el estudio de la sabiduría, que es entendida como un todo: «toda filosofía es como un árbol cuyas raíces son la metafísica, el tronco la física y las ramas que salen de ese tronco todas las demás ciencias, que se reducen a tres principales: la medicina, la mecánica y la moral (…), que es el último grado de la sabiduría». Así pues, Descartes se decide por una filosofía que asegure el conocimiento perfecto de todas las cosas que el hombre puede saber, tanto para la conducta de su vida (moral), como para la conservación de su salud (medicina) como para la invención de las artes (mecánica). Si toda la casa se derrumba, si se hunden la vieja metafísica y la vieja ciencia, entonces el nuevo método aparecerá como el principio de un saber nuevo, que está en disposición de impedir que nos perdamos en ciertas formas de escepticismo. Es urgente, pues, diseñar una filosofía que justifique la confianza en la razón, una filosofía capaz de encontrar la verdad fundamentándose en un método universal y fecundo. Descartes llama la atención sobre el fundamento, porque de éste depende la amplitud y la solidez del edificio que hay que construir y contraponer al edificio aristotélico, sobre el cual se apoya la tradición filosófica anterior. Lo que urge poner en claro es el fundamento que permita un nuevo tipo de conocimiento de la totalidad de lo real, por lo menos en sus líneas esenciales.

En síntesis, el proyecto cartesiano propugna la unidad de todas las ciencias, que dependen de un único método obtenido a partir del modelo que ofrecen las matemáticas. Descartes consagra la razón como fuente principal de conocimiento y seguro criterio de verdad. Sobre tales principios racionalistas apoya, a su vez, su método que será, a un mismo tiempo, punto de arranque y meta de su filosofía. En este sentido, Descartes hace del método matemático el método de todo lo real: sustituye la complejidad de lo real por las ideas claras y distintas. Las ideas serán los modelos a los que debe ajustarse la realidad, o bien serán la misma realidad. De esta manera, el pensamiento será la condición del ser y el «cogito» (tal y como analizaremos) será el principio o punto de partida del que se deducirá todo lo real.

Tal y como ya hemos señalado, el método es el gran principio unificador en el sistema cartesiano, pues revela su teoría de la ciencia única. En sus Reglas para la dirección del espíritu señala que «antes que hacerlo sin método, es mejor renunciar a buscar verdad alguna». Como la inteligencia es la misma en todos los hombres, el método debe ser uno y universal, no limitado a materia alguna en particular, sino aplicable a todo conocimiento. El método tiene como principal objetivo facilitar el uso natural de la razón que, abandonada a sí misma, no se equivoca.

Descartes concibe el método como un camino seguro que nos llevará a un conocimiento perfecto, proporcionándonos certeza y evidencia, pues «toda ciencia es un conocimiento cierto y evidente». Así pues, entiende el método como un conjunto de reglas ciertas y sencillas que impiden tomar jamás un error por una verdad. En este sentido, afirma: «Entiendo por método reglas ciertas y fáciles, mediante las cuales el que las observe exactamente no tomará nunca nada falso por verdadero y, no empleando inútilmente ningún esfuerzo de la mente, sino aumentando siempre gradualmente su ciencia, llegará al conocimiento verdadero de todo aquello de que es capaz» (Reglas para la dirección del espíritu). Teniendo en cuenta esta definición, apreciamos que las ventajas de este método son que:

  1. evita el error llevándonos a la verdad con seguridad
  2. permite aumentar los conocimientos verdaderos
  3. es sencillo.

Para Descartes, «intuición» y «deducción» son las dos operaciones fundamentales de la mente; si bien hace todo lo posible por intentar reducir esta última a la primera. El método consiste en reglas para emplear correctamente estas dos operaciones mentales. La finalidad del método consistirá en posibilitar el ejercicio de la intuición, y en señalar la manera adecuada de realizar deducciones, así como en seguir el orden. Con ello colocará a la mente en el umbral mismo de la ciencia.

Reglas del método

          1ª regla. Constituye tanto el punto de partida como el punto de llegada del método. Dice así: “Nuca acoger nada como verdadero, si antes no se conoce que lo es con evidencia: por lo tanto evitar la precipitación; y no establecer juicios que estén más allá de lo que se presenta ante mi inteligencia de forma clara y distinta excluyendo cualquier posibilidad de duda”. Esta primera regla se convierte así en el principio normativo fundamental, porque todo debe converger hacia la claridad y la distinción, a las que precisamente se reduce la evidencia. ¿Cuál es el acto intelectual mediante el cual se logra la evidencia? Es la intuición, que Descartes describe de la siguiente forma: “No es el testimonio fluctuante de los sentidos o el juicio falaz de la imaginación, sino un concepto de la mente pura y atenta, tan fácil y distinto que no queda ninguna duda alrededor de lo que pensamos”. El acto intuitivo, la intuición, se autofundamenta y se autojustifica, ya que tiene como garantía la transparencia entre razón y contenido intuitivo. Se trata de aquella idea clara y distinta que refleja “sólo la luz de la razón”, sin que todavía se haya puesto en relación con otras ideas, sino considerada en sí misma. El objetivo de las otras tres reglas consiste en llegar a esta transparencia mutua.

          2ª regla. “Dividir todo problema que se someta a estudio en tantas partes menores como sea posible y necesario para resolverlo mejor”. Se trata de un defensa del método analítico, el único que nos puede llevar hasta la evidencia, porque al desmenuzar lo complejo en sus partes más sencillas, permite que el intelecto despeje todas sus dudas. La intuición necesita de la simplicidad que se logra a través de la descomposición de lo complejo. Descartes llama “simple” aquello cuyo conocimiento es tan claro y distinto que la mente no puede dividirlo más. Si lo verdadero está mezclado con lo falso, el método analítico deshace tal mezcla liberando lo verdadero.

          3ª regla. Al análisis le debe seguir la síntesis. “La tercera regla es la de conducir con orden mis pensamientos, comenzando por los objetos más simples y más fáciles de conocer, para ascender poco a poco, hasta el conocimiento de los más complejos, suponiendo que hay un orden”. Se trata de reconstruir un orden o de crear una cadena de razonamientos, que van desde lo sencillo hasta lo compuesto y que no pueden dejar de tener una correspondencia con la realidad. ¿Cuál es la importancia de la síntesis? Puede parecer que a través de este doble trabajo no surge nada realmente nuevo, ya que acabamos por encontrar el mismo objeto del cuál habíamos partido. En realidad ya no es el mismo objeto: el compuesto reconstruido es otra cosa, ya que está penetrado por la luminosidad transparente del pensamiento.

          4ª regla. “La última regla es la de efectuar en todas partes enumeraciones tan complejas y revisiones tan generales que se esté seguro de no haber omitido nada”.

          Todo el método consiste en seguir un orden, es decir, en reconducir las proposiciones oscuras a las más simples, y en ascender a continuación, gradualmente, de lo más simple a lo más complejo, apoyándose siempre en la intuición y en la deducción. La intuición es una visión o mirada precisa e indubitable, concepción de un espíritu atento y puro, conocimiento directo o inmediato, que permite tomar una cosa como verdadera al captar su idea clara y distintamente. Es clara una idea (contenido espiritual u objeto de pensamiento en tanto que pensado) presente y manifiesta para un espíritu atento. Por su parte, una idea es distinta cuando nos aparece de manera precisa y diferente a todas las demás. El proceder de Descartes descansa, pues, en la evidencia, es decir, en el carácter de lo que se impone inmediatamente al espíritu y entraña su asentimiento. Junto a la intuición es necesaria también la deducción racional: operación discursiva que supone un camino, una demostración o encadenamiento lógico o sucesión. La deducción representa un movimiento ordenado que va de proposición en proposición, un lazo establecido entre verdades intuitivas.

Las cuatro reglas que expone Descartes en su “Discurso del Método”, son reglas simples que subrayan la necesidad de que se tenga una plena conciencia de los pasos mediante los cuales se articula cualquier investigación rigurosa. Constituyen el modelo del saber, porque la claridad y la distinción evitan los posibles equívocos o las generalizaciones apresuradas. A tal efecto, ante los problemas complejos y ante fenómenos confusos, hay que llegar hasta los elementos más simples, que no pueden descomponerse más, para que queden iluminados por la luz de la razón.

Campo léxico y campo semántico

En ambos  casos se trata de dos tipos de relaciones semánticas entre palabras.

  • El campo semántico es un conjunto de palabras de la misma categoría gramatical ( todas  las palabras que conforman un mismo campo semántico deben ser sustantivos o todas ellas deben ser verbos o deben pertenecer a cualquier otra categoría gramatical) que comparten (más allá de sus diferencias) una parte común de significado.

 Ejemplos:
Campo semántico de la clase: mesa, silla, bolígrafo, pizarra… Todas estas palabras pertenecen a una misma categoría gramatical (todas son sustantivos) y comparten un rasgo de significado (todas son objetos de la clase), a pesar de las diferencias específicas de cada objeto y de su utilidad.
Campo semántico de los instrumentos musicales: guitarra, clarinete, violín, tuba, piano, flauta…
-Campo semántico de los miembros de la familia: hijo, abuelo, tío, suegra, nuera, bisabuelo, hermano, padre, madre…
-Campo semántico de las flores: amapola, geranio, azuzena, clavel, lirio…
-Campo semántico de los transportes: coche, tren, autocar, taxi, avión…
-Campo semántico de las armas de fuego: pistola, escopeta, fusil, ametralladora, trabuco, cañón, misil… Todas estas palabras son sustantivos que comparten un rasgo de significado (armas de fuego), a pesar de diferenciarse unas de otras por algún rasgo o característica (calibre de la bala, alcance…).
-Campo semántico de las armas blancas: navaja, cuchillo, sable, florete… Todas estas palabras son sustantivos que comparten un rasgo de significado o sema (son armas blancas), aunque se diferencian entre sí en algunos rasgos distintivos (de un filo o de dos, de uso doméstico o para la guerra, …).
-Campo semántico de los asientos: silla, sillón, sofá, taburete, mecedora, tumbona…. Todas estas palabras  pertenecen a una misma categoría gramatical (todas ellas son sustantivos) y tienen en común el rasgo de significado “objetos para sentarse”, pero a su vez, todas se diferencian entre si por algún rasgo o característica (por ej. el sofá tiene brazos y el taburete no; el taburete es un asiento individual y en el sofá pueden sentarse varias personas, etc).
-Campo semántico de bailes: salsa, reggaeton, hip-hop, tango, merengue,… Todas estas palabras  pertenecen a una misma categoría gramatical (son sustantivos) y comparten una parte de significado (bailes), pero cada uno se distingue de otro por los pasos y la forma de bailarse.
-Otro ejemplo de campo semántico lo constituyen las palabras pared, tapia, muro, muralla..  Todas estas palabras son sustantivos y comparten un mismo rasgo de significado (todas ellas son obras de albañilería que permiten separar espacios), aunque se diferencian unas de otras por diferentes aspectos o características, por ejemplo el muro es grueso, mientras que la tapia es delgada.

  • Un campo léxico es un conjunto de palabras de diferentes categorías gramaticales que están relacionadas con un mismo tema.

Como vemos, en un campo léxico (a diferencia del campo semántico en el que las palabras tenían que pertenecer a una única categoría gramatical) podemos tener varias categorías gramaticales, es decir,  podemos tener palabras que sean adjetivos, sustantivos, verbos, etc, pero todas estas categorías tienen en común el pertenecer a un mismo tema.
 Ejemplos:
-Campo léxico de la clase: estudiar (verbo), aprobar (verbo), suspender (verbo), enseñar (verbo) profesor (sustantivo), alumno (sustantivo), difícil (adjetivo), etc. Como vemos, tenemos diferentes categorías gramaticales: verbos, adjetivos y sustantivos.
Campo léxico de la enseñanza:

Nota de corte Universidades Catalanas y parámetros de ponderación de las materias de bachillerato

Ponemos a su disposición dos documentos que le permitirán informarse de la relación de los parámetros de ponderación  de las materias y de la nota de corte establecida en las Universidades Catalanas para el año 2011-2012.

Relación de los parámetros de ponderación de las materias de modalidad del bachillerato en relación con las enseñanzas universitarias
Nota de corte en las distintas Universidades Catalanas  – Nota de acceso a las diferentes universidades catalanas:
http://www.notesdetall.com/
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Auroras boreales

Las auroras boreales son uno de los mayores espectáculos visuales con los que nos puede recompensar la madre naturaleza. Es por ello que a lo largo de la historia de la humanidad han aparecido diversas teorías y leyendas que han tratado de explicar el origen de estas misteriosas  luces.

En finés se llaman «revontulet», que significa «fuegos del zorro«. Este nombre deriva de una antigua leyenda sobre el zorro del ártico que decía que los rabos de los zorros que corrían por los montes lapones, se golpeaban contra los montones de nieve y las chispas que salían de tales golpes se reflejaban en el cielo. En otras culturas se decía que estos brillos resplandecientes eran emitidos por algunos tipos de hongos que crecen en la madera podrida.

Los esquimales, los lapones, los habitantes de Groenlandia, e incluso las tribus del noreste de la India estaban familiarizados con esta luz misteriosa del cielo. Sus leyendas tomaban muchas formas y estaban asociadas con sus ideas de la vida en el otro mundo. Según una leyenda esquimal, la aurora boreal era un sendero estrecho, sinuoso y peligroso que conducía a las regiones celestiales y su luz se debía a la llegada de los nuevos espíritus.

La aurora del hemisferio norte fue nombrada aurora boreal (luces del norte) por el científico francés Pierre Gassendi en 1621, quien fue el primero en hacer observaciones aurorales sistemáticas. La aurora del sur fue nombrada aurora austral (luces del sur) por el capitán James Cook en 1773, cuando la observó por primera vez en el Océano Índico. Ya los filósofos griegos consideraban a la aurora del norte como un fenómeno natural, y la asociaban con el reflejo de la luz en los hielos polares.
La explicación científica nos dice que la aurora boreal es el nombre que se le da al juego de luces celestes provocadas por un fenómeno electromagnético que tiene lugar al chocar las partículas eléctricas procedentes del sol con el campo magnético de la tierra. El sol desprende partículas cargadas de mucha energía, iones, protones y electrones, los cuales viajan por el espacio a velocidades entre 320 y 704 kilómetros por segundo, es decir, necesitan tan solo entre 130 y 60 horas en llegar a la Tierra. Al conjunto de partículas que vienen del Sol se les conoce como viento solar. Cuando estas partículas interactúan con los bordes del campo magnético terrestre (ionosfera) y chocan con los gases en la ionosfera, empiezan a brillar, produciendo el espectáculo que conocemos como aurora boreal y austral. La variedad de colores, rojo, verde, azul y violeta que aparecen en el cielo se deben a los diferentes gases que componen la ionosfera.
La Aurora Boreal está en constante cambio debido a la variación de la interacción entre las ráfagas de viento solar y el campo magnético de la tierra. El viento solar genera normalmente más de 100.000 megavatios de electricidad (la producción de una central nuclear convencional es de 1000 MW diarios) produciendo una aurora, lo que puede causar interferencias con las líneas eléctricas, emisiones radiofónicas o televisivas y comunicaciones por satélite.
A través del estudio de las auroras los científicos pueden aprender más sobre el viento solar, cómo éste afecta a nuestra atmósfera y cómo la energía de las auroras podría ser usada para objetivos útiles
Para que se puedan ver las auroras boreales con nitidez, se tienen que dar una serie de circunstancias, como estar ubicado en latitudes extremas, que haya mucha actividad solar, que no exista ningún tipo de contaminación lumínica y que el cielo esté completamente despejado de nubes.
Aquí os dejo un enlace con la webcam del Aurora Skystation de Abisko (Suecia) que es un centro especializado en este tipo de luces y que está ubicado en Laponia, en el Círculo Polar Ártico.  Desde aquí podréis viajar disfrutar cada noche en directo del maravilloso espectáculo de las auroras boreales, como veréis es un fenómeno inolvidable.
                        http://www.auroraskystation.se/livecamera 
Aquí os dejo también dos vídeos para que podáis observar esta maravilla de la naturaleza:

[youtube=http://www.youtube.com/watch?v=FcfWsj9OnsI]

[youtube=http://www.youtube.com/watch?v=jFJOnwmN_8A&feature=related]

Leyenda de Sadako Sasaki y las mil grullas de origami. Mil grullas por Japón. Una leyenda para la esperanza.

Según una leyenda japonesa, tu mayor deseo se hará realidad, si construyes mil grullas de papel. La consigna de crear grullas de papel en la lucha por la paz, se remonta a la historia de una de las pequeñas víctimas de la bomba de Hiroshima durante la Segunda Guerra Mundial.

Sadako Sasaki tenía dos años cuando cayó la bomba en Hiroshima, ciudad en la que vivía. Diez  años más tarde (cuando tenía 12 años), como consecuencia de la irradiación que le produjo la bomba de Hiroshima, los médicos le diagnosticaron leucemia. Cuando la pequeña Sadako estaba en el hospital recuperándose de su enfermedad, su amiga Chizucho le explicó la historia de las 1.000  grullas de papel. La historia consiste en que si deseas algo con mucha fuerza y  construyes 1.000 grullas de papel ( papiroflexia), los dioses te concederán ese deseo que tanto anhelas.
Es así como Sadako deseó curarse de su terrible enfermedad y para ello se propuso construir por sí misma 1.000 grullas de papel, aunque no logró conseguirlo porque falleció mucho antes de poder acabarlas todas. Murió en octubre de 1955 y sólo había conseguido plegar 644 grullas de papel. Simbólicamente, sus amigos continuaron su misión y completaron las mil grullas, con la esperanza de que se evitaran las guerras en el futuro y se consiguiera la paz entre todos los países del mundo. Tres años más tarde de la muerte de Sadako, los niños de toda la ciudad de Hiroshima le dedicaron una estatua de ella con una grulla en su mano. La estatua está en el  Parque de la Paz de Hiroshima.

Cada año, para el 6 de agosto, Día de la Paz, llegan miles de grullas de papel a Hiroshima desde todos los lugares del planeta. Los niños de la ciudad cuelgan las grullas en el monumento de Sadako, con la esperanza de transmitir este mensaje a todo el mundo.
En estos días, como consecuencia del Terremoto de Japón, muchísimas personas y asociaciones de todos los lugares del mundo se han propuesto construir grullas de papel con la finalidad de enviarlas a Japón. En Japón hay personas encargadas de recoger estas grullas que la gente envía anónimamente y colocarlas en los distintos templos del país, con el deseo de que Japón pueda salir de la pesadilla  que está viviendo y que la vida, la salud, la esperanza y la prosperidad se restablezcan de nuevo en sus vidas.
Una japonesa residente en Madrid ha recuperado la leyenda japonesa de las mil grullas de papel para pedir a los internautas que se unan a esta iniciativa de abrazo y ánimo a Japón que simboliza la paz.
A través de una página web llamada ‘Las 1.000 grullas ‘.  Makiko pide ayuda para completar las mil grullas de papel de las que habla la leyenda. Quien las complete, recibirá un deseo. Y ése, ahora mismo, no es otro que el fin de la amenaza de catástrofe nuclear y la mejor de las suertes para todos los damnificados. La grulla de la paz deja ahora paso a la grulla de la solidaridad, que desde todos los rincones inunda ya las webs con múltiples mensajes de apoyo.

¿Por qué un grulla?
Para los japoneses la grulla es el símbolo de la paz, como para nosotros lo es la paloma blanca. Para los japoneses la grulla además de paz, significa salud.
¿Qué es una grulla?
Las grullas son aves de espacios abiertos. Se desplazan dando zancadas con sus largas patas  y recogen semillas e insectos con sus largos picos. Viven en bandadas y muchas de ellas recorren largas distancias para criar. Las distintas variedades de grullas tienen en común que se emparejan de por vida. Son muy fieles.
¿Qué es el origami?
El origami es parte integral de la cultura japonesa desde hace más de 1.000 años .  Su técnica se  basa en el plegado de papel para crear figuras (papiroflexia).
Aquí os dejo un vídeo precioso que ilustra sin palabras la triste historia de Sadako Sasaki. Os animo a verlo porque es realmente conmovedor.

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